Todos dicen que el perro es el mejor amigo del hombre. ¿Y los gatos qué?
Dicen que los perros pueden ser leales, que darían su vida por su dueño... Bueno, mi gata era mi vida... Y para ella va esta entrada.
Aún recuerdo el día que me la regalaron. Fue el verano pasado y yo estaba dormitando en el sofá, gracias al calor que hacía, cuando me la lanzaron a mi lado. Al principio pensé que era una pelusa.
Y Sí que lo fue. Era mi pelusa. Oí un ronroneo y al abrir los ojos ví al típico gato que le daría miedo a cualquiera que lo viera en un callejón oscuro: Negro como la noche y con los ojos amarillentos, el típico gato que no le gustaría a todo el mundo, el gato perfecto para alguien como yo...
Esa noche durmió conmigo, bueno esas y todas las noches de la semana que quedaba antes de irme a Irlanda... Normalmente me encantaba irme a ese verde país pero sabía que iba a echar de menos a mi niña... Sin embargo, y gracias a dios, las tres semanas pasaron volando y cual fue mi sorpresa que al llegar a casa tenía otra gata. Manchitas.
Era otra preciosidad pero... No podía evitar querer más a Pelusa... A mi pequeñina...
Pasaban los días, las semanas, los meses y ese pequeño felino y yo estábamos cada vez más unidas... Siempre que me tocaba tender la ropa ella se movía entre mis piernas, haciéndome cosquillas (ya que iba descalza). Y... Esas noches en las que sólo me apetecía estar sola, acurrucada en el balcón, mirando la luna y las estrellas, sin poder hacer otra cosa mas que llorar. Ella venía,
se sentaba sobre mi y ronroneaba, jugaba con mi pelo. Cualquier cosa, pero me hacía sonreír. Olvidar mis problemas...
Quizá llegados a este punto de mi pequeña entrada, pienses que estoy completa e irrevocablemente loca pero... Es así, para mi, mi gata no era una simple mascota era... Alguien de mi familia... Recuerdo el día en que tuvo las crías más hermosas del mundo. Mis 2 pequeños: Irbis y Tiger...
Y ahora ella no está, desapareció, Quizá es feliz, quizá haya muerto... Solo sé que ahora tender se me hace eterno y aburrido. Que la luna ya no brilla igual, puede ser por que no hay nada ni nadie que me borre las lágrimas, que... Que la echaré de menos todos y cada uno de los días de mi vida.
Por que era mi preciosa, mi gata, mi pelusa, mi vida...
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